Un estudio de suelos es un análisis que se hace para entender cómo es el terreno en el que se quiere construir algo. Ayuda a saber si el suelo es seguro y adecuado para construir una carretera, un edificio o cualquier otra estructura.

Sirve para conocer si el suelo es lo suficientemente resistente y estable para soportar lo que se va a construir. También nos dice si hay algún problema, como agua subterránea o terreno inestable, que pueda afectar la construcción.

Te lo piden antes de hacer una construcción importante, como una casa, una carretera o un edificio. Esto asegura que el terreno sea adecuado y que la construcción no tenga problemas en el futuro.

Primero, los especialistas van al terreno y toman muestras del suelo. Luego, esas muestras se analizan en un laboratorio para conocer sus características, como la resistencia y la estabilidad. También miden la profundidad del agua subterránea. Con esos resultados, se determina si el terreno es adecuado o si necesita algún tipo de mejora.